Nuestra angustia, que es leve y pasajera, nos prepara una salvación eterna, que supera toda medida. Porque no tenemos puesta la ojeada en las cosas visibles, sino en las invisibles: lo que se ve es transitorio, lo que no se ve es infinito. Pero el Señor es un profesor https://mariobigax.uzblog.net/detalles-ficción-y-citas-bíblicas-de-esperanza-45988500